Versión de HTML Básico
Mauro
uita
sueños
¿Qué encontraste en México que no había
en Italia?
Muchas oportunidades; y se siguen dando.
¿Te duele la cara de ser tan guapo?
No, no me duele. Me da muchísimo gusto, y
además ¡me gusto! No estoy peleado para nada
conmigo mismo; quizá no me gusta mi panza, pero
mi cara sí.
Espejito, espejito…
No sé por qué me dicen que soy probablemente
de los que se ven mucho en el espejo. Y no. Me
levanto en la mañana, me peino una vez y re-
greso a las ocho de la noche, se acabó. No me
repeino, no me veo más en un espejo.
El top ten de tu atractivo…
Jajaja. No´mbre, no sé. ¿Qué onda con esas pre-
guntas? Me voy a oír muy muy mal… Pero insistién-
dome, jajaja, creo que primero los ojos, luego la
mirada, el porte, después puede ser lo mamón, el
carácter, además que normalmente lo que digo,
lo hago. La verdad, no sé…. ¡Y 10 cosas son mu-
chas!
¿Verbo mata carita?
Ay, ay… Quién sabe. Pero al principio, la carita,
después el verbo, seguramente.
En el amor, ¿cómo descorchas un romance?…
Con algo imprevisto, que nadie se espera.
¿Cuál es tu primer tiempo en el amor?…
El coqueteo, que es una cosa básica.
El plato fuerte…
Que mi pareja quede totalmente satisfecha.
El postre…
Pues ¡el postre soy yo!
Tu tentación difícil de vencer…
Tengo muchas, pero la verdad, mi mujer.
¿Eres más arrogante que peleonero?
Jajaja… ¡Esa pregunta me encantó!... Pero creo que soy más peleonero que
arrogante. Ahora si me dices más peleonero que soberbio, ¡pues está cañón!
Aunque esto último me ha llevado a hacer muchas cosas bien.
Tu mezcla perfecta de varitales…
Uvas… afrutadas, con un poco de dulzor, y al mismo tiempo con un poco
de algo fuerte… Así es el Amorone, mi vino predilecto, porque tiene un poco
de todo.
¿Cuál es tu restaurante favorito de Cancún que no sea de tu propie-
dad?
El Grill del Ritz-Carlton para mí es increíble. Después hay otras tres o cuatro
opciones, que pueden ser desde el Tai hasta Hanaichi, Puerto Madero, Los
Tacos de la Amiguita, el taco de buche de la Náder. Depende qué necesito
comer…
¿Cuál es el único ritual imprescindible en tu vida?
Dormir con mi mujer al lado.
¿Dónde queda el paraíso?
Digamos que está muy cerca de mi mujer…
Uno se conserva solamente
disfrutando lo que uno hace, primero; segundo,
sintiéndote contento contigo mismo, y por eso
hay que quererse a sí mismo, no menospreciarse,
aunque puede ser que a veces exageres
32