Entrevista con Iriana del Rivero

¿Cómo llegaste a Grupo Ultrafemme?
En el 2007 regresé de Europa para el cumpleaños 60 de mi papá. Justo estaba en la disyuntiva de si me quedaba a trabajar en Francia o regresaba a México. Siempre pensé que Grupo Ultrafemme sería mi mejor opción para trabajar en Cancún por su vinculación con las marcas europeas líderes en la industria de moda y diseño que me interesaban. Fui a entrevista de trabajo, y entre otras cosas llevé un proyecto editorial que hice para el área comercial de Volkswagen cuando trabajé en el corporativo en Puebla. En él hacía referencia a la empresa inglesa Illustrated London News, que curiosamente era el Publisher que Grupo Ultra había contratado hace años para hacer la revista de moda de Luxury Avenue y quienes estaban buscando un Account Manager que estuviera como implant en las oficinas en Cancún.  Tuve la suerte que todo fluyera perfecto y que ese mismo día me entrevistaran Lucy Moreno, directora de Marketing; Elena Villarreal, presidenta del grupo, y, por conference call, Lisa Barnard, la CEO de ILN. A estas tres mujeres, especialmente a mi suegra, les debo haberme dado esa oportunidad.

¿Estudiaste Diseño de Modas?
Lo consideré, pero terminé estudiando Diseño de Información. Me pareció una carrera muy completa, que me iba a dar las herramientas para desempeñarme a nivel profesional y afortunadamente así fue.

Tu vida en rosa…
Viví entre Lyon y París, y como bien dice el dicho ‘Travel is the only thing you buy that makes you richer’, así que por supuesto aproveché mi estancia en Europa para viajar lo más que pude gracias al apoyo de mis papás.

Si fueras una princesa de Disney ¿cuál serías?
¡Ninguna!… De hecho, con riesgo de sonar medio grinch o feminista, no me gusta el perfil con el que se estereotipa a la mujer en los cuentos de Disney, sobre todo en su ‘época de oro’… Blancanieves y Cenicienta por ejemplo, son pasivas, dependientes, sumisas, solo se dedican a hacer tareas domésticas y están en espera de que llegue su príncipe azul a rescatarlas… ¿Really? Qué bueno que ya evolucionaron los cuentos infantiles y ahora las niñas reciben otra información y educación desde chiquitas.

Pero sí te llegó tu príncipe…
No soy tan cursi… Más bien tuve suerte de encontrar a un hombre noble, trabajador, inteligente, responsable, educado, que me quiere y me respeta. Hoy estoy enamorada y felizmente casada, pero como cualquier matrimonio tenemos nuestras altas y bajas.

¿Amor a primera vista?
¡No, para nada! Al contrario, cuando Pepe se enteró que su mamá me había contratado se infartó, porque pensó que estaba muy joven y con poca experiencia para el nivel de responsabilidad. Elena le decía que me conociera, que le iba a encantar y mira… un par de años después nos terminamos casando. De hecho mi suegra siempre dice que desde que me conoció le gusté para nuera, así que ahora que lo dices, creo que más bien el amor a primera vista fue con ella, ¡no con mi marido! Jajaja…

¿Cuándo surgió el amor?
Cuando Pepe me entrevistó le dije que necesitaba tres meses para demostrar que podía con la responsabilidad y presenté un business plan para medir mis resultados. Al principio me hablaba diario a mi oficina al final del día para preguntarme cómo iba. Yo pensaba ‘qué flojera con este individuo que me quiere agarrar en el error’… Días después me di cuenta que en realidad solo buscaba pretextos para platicar conmigo e invitarme a salir. Además de vernos diario por trabajo nos encontrábamos en todos lados; frecuentábamos los mismos lugares, teníamos amigos en común. Poco a poco empezamos a salir, nos enamoramos y la ‘niña inexperta’ demostró que no solo podía con el trabajo, sino hasta con el director general, jajaja…

¿Iriana se construyó con Pepe García?
Aunque por supuesto mi esposo me ha apoyado muchísimo en todos mis proyectos desde que nos casamos, y sin duda ahora como matrimonio nos ayudamos y complementamos,  si a alguien debo agradecer principalmente por quien soy y lo que he logrado es a mis papás. Tanto a mi mamá por su formación como a mi papá por ser nuestro sustento, y por siempre trabajar para darnos lo mejor, por haber invertido en mi educación, cultura y viajes.

¿Qué es la maternidad para ti?
Lo mejor que ha pasado en mi vida. Antes de ser mamá por supuesto tenía cero desarrollado el instinto maternal, de hecho le huía a los niños y no imaginaba cómo sería mi vida con hijos. Ahora la verdad me sorprendo de lo mucho que disfruto esta nueva etapa y de lo que soy capaz de hacer por mis niños.

El llanto de una madre…
Cuando nació Patrick no paré de llorar de la emoción cuando me lo dieron en el quirófano, ¡impresionante, y mi marido peor! Me cambiaron al 100% mi escala de prioridades. Sin duda ha sido también un gran reto, adicional a lo complejo que de por sí ya es aprender a ser mamá, he tenido que aprender a equilibrarlo con mi vida profesional; ahora soy mega multitask y súper organizada con mis tiempos. Disfruto mucho a mis hijos y también mi vida profesional, así que hago mi mejor esfuerzo para tener lo mejor de los dos mundos, ambos me han dado muchas satisfacciones.

¿Tendrías otro bebé?
Yo estoy feliz con dos hijos. Cuando nació Patrick decidí que tendría dos porque estoy segura que el mejor regalo que le pude haber dado en la vida fue a su hermano Nickolas… yo sé lo que es tener una hermana, somos compañeras de vida y estoy feliz de saber que mis hijos se tendrán también el uno al otro. Pepe en cambio quiere cuatro, creció como hijo único y por lo mismo tiene la ilusión de tener familia grande, de hecho el segundo embarazo lo planeé para darle la sorpresa como regalo de sus 40 años. Y ahorita está haciendo su mejor esfuerzo para convencerme de ir por un tercero, porque se muere por una niña.

Ya tienes una niña… ¡Concept Store!
Es mi otro bebé, acaba de cumplir dos años. Analizando el mercado vi una oportunidad de desarrollar un concepto innovador en Cancún, en el que los turistas que nos visitan pudieran encontrar piezas únicas de diseñadores mexicanos y latinoamericanos que desfilan en importantes plataformas como Fashion Week, como es el caso de David Salomón, Pepa Pombo, Pink Magnolia, y algunos accesorios one-of-a-kind de marcas emergentes propositivas como los trajes de baño Llena Eres de Gracia, los zapatos Melissa o las bolsas Basbag. Ha sido todo un proyecto que superó mis expectativas, resultado de un gran trabajo en equipo.

Tu alianza con Elle…
Recientemente cerré una alianza con Grupo Expansión. A partir de este año somos parte del premio a los ganadores del primer y segundo lugar del concurso México Diseña by Elle. Al estar ubicados dentro de Luxury Avenue Cancún, en el principal destino turístico de México, somos una excelente plataforma para impulsar nuevos talentos en la industria de la moda en nuestro país.

Cuéntame del IPADE…
Cuando nació Patrick dejé de trabajar un año para cuidarlo y aproveché para seguirme preparando. Estudié el master en Alta Direcciòn de Empresas AD2. Fue un reto increíble, no sólo tenía un recién nacido, sino que fui la única mujer de mi generación y la que menos trayectoria profesional tenía. ¡Me tuve que súper aplicar! Además del plan de estudios que sigue la metodología del caso principalmente de la Universidad de Harvard, aprendí de la experiencia de otros empresarios de Cancún, todos de verdad unos tipazos.

¿Qué es para ti la moda?
Una industria millonaria con la que he estado vinculada a lo largo de mi vida profesional. Por otro lado, una forma personal de expresión y diferenciación que me divierte. ¡Es mi hobby!

¿Te consideras fashionista?
Sí, además de que en lo personal me gusta estar a la vanguardia e informada de tendencias, a lo largo de mi vida profesional me he dedicado de una u otra forma a promover la moda. Primero dirigiendo la estrategia editorial de la revista, después con la estrategia comercial de Luxury Avenue y ahora con Concept Store aún más, porque entre otras cosas hago la curaduría de producto, me dedico a seleccionar a los diseñadores y marcas que tenemos. Incluso organizamos un Fashion Runway durante su segundo aniversario.

¿Crees que, de alguna manera, estás marcando tendencia en el Caribe mexicano?
Más allá de la forma de vestir, me gusta pensar que formo parte de un grupo de mujeres que estamos marcando tendencia. Que buscamos desarrollarnos profesionalmente a pesar de “no tener la necesidad económica de hacerlo”, pero sí una necesidad de crecimiento personal.