U
n día en la vida de
…
V
erónica
T
orres
5:45
horas
.
Me levanto, me
baño y me visto en 15
minutos.
6:00
horas.
Levanto a mis tres hijos y ha-
cemos todo el ritual del desayuno.
6:45
horas. Salimos de casa y empieza la
ronda de pasar por otros niños y dejarlos en
el colegio. Hay días que me voy directo al
CRIT o regreso a tomarme un café con mi
marido, ya sea en casa o en algún café.
7:45
horas.
Me dirijo al CRIT.
8:00
horas.
Llego al CRIT y lo primero que
hago es pasar a la capilla para enco-
mendar mi día a Dios. Checo mails y
verifico pendientes de oficina.
12:00
horas.
Salgo al lobby para
tomar aire, platicar con las mamás
y convivir con los niños del Teletón.
14:30
horas.
Voy a recoger a
mis hijos a la escuela y si tengo
mucha chamba sólo los dejo
en la casa y me regreso, pero
si tengo tiempo me quedo a
comer con ellos.
15:30
horas.
De nuevo en la
oficina del CRIT.
16:30
horas.
Salgo del trabajo
y voy por mis hijos para llevarlos
a sus actividades vespertinas.
17:00
horas
.
A esta hora dejo a mi hija
María en su clase de ballet.
18:00
horas.
Recojo a mi hijo del futbol.
19:00
horas.
Llevo a mi otro hijo al tenis.
20:00
horas.
Lunes, miércoles y viernes me voy a
mi clase de salsa.
21:00
horas.
Voy por mi
hija al ballet
porque a esta
hora sale.
21:00
horas. Llegamos
a la casa y cenamos muy poco
porque todos estamos cansados.
22:00
horas. Me preparo para
dormir. Difícilmente llego a ver el
noticiero de López Dóriga porque
mi cansancio me gana.
Los fines de semana son días fa-
miliares, y es cuando aprovecho
para tomar fotos e ir a la playa,
salir a patinar o ir al cine en la
noche.
V
ero es una mujer que
vive intensamente; como
publirrelacionista del CRIT
tiene que estar pendiente de
que los apoyos lleguen y los
niños reciban sus terapias,
además de cuidar cada
minuto para que su día
le rinda como esposa,
mamá y chofer de toda
la familia.
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